UN JUEGO MORTAL
Yo seguí las
indicaciones hasta llegar a la UNISON, polilla estaba muy quieto, íbamos en el
auto de Lucy, despacio para tratar de no hacer tanto ruido y atraer a mas
bestias hambrientas, conforme avanzábamos el paisaje no mejoraba, al contrario,
empeoraba, mas cuerpos en las calles, algunos completos solo con mordeduras,
otros mutilados, partes de cuerpos por todas partes, autos estrellados unos
contra otros, en los negocios, en casas, vidrios, tubos y palos que parecían
haber sido utilizados como arma, pues estaban cubiertos de sangre, mire hacia
arriba, en el semáforo, que irónicamente aun funcionaba, estaba un cartel,
UNIZOMBIE A 400m, seguimos adelante, despacio, cautelosos, al fin llegamos a la
UNISON, en rectoría, estaba una gran manta que cubría casi de arriba abajo el
edificio.
UNIZOMBIE EN PROGRESO, ENTRA SI TE ATREVEZ, eso decía la
manta, tenía manchas de pintura simulando sangre, algunos zombies mal dibujados,
partes del cuerpo mutiladas, tal vez pensaron que se vería aterrador pero en
realidad se veía ridículo, nos detuvimos en la entrada, estaba cerrada con una
gruesa cadena y un enorme candado, si eso era solo un juego se lo tomaron muy
en serio, no sé porque pero sentí la necesidad de entrar, no me dejaba guiar
por mis impulsos pero esta vez lo hice, ayude a polilla a cruzar el cerco, y
después lo cruce yo, tal vez podría ser
un buen refugio, está totalmente cercado, y sus edificios son de dos pisos o
tres, un último piso sería perfecto para resguardarme, avanzamos por la parte
derecha de rectoría, por la calle, siempre mirando alrededor, siempre
cuidadosos y silenciosos, logramos llegar hasta
psicología, el lugar donde tomo mis clases, todo se veía vacio, el lugar
no era precisamente el más bonito de la universidad, ni antes ni ahora,
teníamos solo unas bancas de fierro oxidados con varias capas de pintura sobre
ellas, no era un lugar muy confortable, tal vez asumían que como psicólogos
pasábamos la mayor parte leyendo y viendo a las demás personas y no nos
importaba nuestro espacio escolar, bueno lo primero que hice fue dirigirme al
que fue mi edificio el semestre pasado, edificio 9F, salón 202, subí por la
escalera al segundo piso, siempre que subía esa escalera sentía algo extraño,
era una sensación de temor y alerta, ahora se había incrementado, los carteles
que siempre estaban pegados incluso de años atrás ahora estaban rasgados, con
manchas de sangre, algunos destrozados en el piso, cuando llegue al segundo
piso, una sensación de ser observado me invadió, mire alrededor, pero no vi
nada, a decir verdad estaba completamente vacío, gire a mi izquierda para
dirigirme al salón 202, me detuve un momento fuera del salón, la puerta no
tenia seguro, mi mano se detuvo antes de empujar la puerta para abrirla, me di
la vuelta, y me quede observando a lo lejos como una chica corría desesperada,
detrás de ella vi a 6 zombis, podía salvarse, pero se cayó, y uno de ellos la
alcanzo, de inmediato aquellos hambrientos monstruos se dieron un festín con la
carne humana, me quede paralizado, me sentí mareado así que me apoye sobre el
barandal de seguridad, polilla ladro, ni
siquiera pude voltear, una mano me tapo la boca y jalo hacia atrás, me metió en
el salón, cuando sentí que su agarre fue más débil, de inmediato me zafé y me
di la vuelta, no me lo esperaba, era Juan, mi amigo que conocí el semestre
anterior, Josephe, vaya forma de encontrarnos—dijo Juan con una sonrisa en su
cara—le di un abrazo, en solo un semestre nos habíamos vuelto muy amigos.
Sabes por qué empezó todo esto?—le pregunte—te diré todo
pero primero calma a tu perro, sus ladridos los pueden atraer—es cierto, le
dije a polilla que se callara—bien pues como sabes hoy se llevaría a cabo
UNIZOMBIE, el típico rally que se hacía en Halloween, pero ahora lo decidieron
hacer en esta fecha como algo motivacional, pero paso algo extraño, nos
hicieron pasar a todos los participantes, todos estábamos al frente de
rectoría, y vimos que cerraron la entrada principal con una cadena muy gruesa y
un candado enorme, como si quisieran que no saliera nadie, nos dijeron que nos separáramos
por los grupos de 4 personas que nos habíamos inscrito, y nos dieron un papel,
el cual decía las instrucciones a seguir, a nosotros nos mandaron a la
biblioteca central, íbamos Luis, Paula, María, y yo, cuando entramos vimos a
uno de los que interpretaban zombis, pero era demasiado real, era como si
realmente fuera un zombi, y se escuchaban gritos por todos lados, gritos de
terror, nos distrajimos y el zombi nos alcanzó, bueno el realidad alcanzo a
Luis, y le arranco un trozo de su cuello, la sangre salpico por todos lados,
Paula y María gritaron y salieron corriendo, yo me quede tratando de quitarle
el zombi de encima a Luis, se suponía que esto era solo un juego pero este tipo
se lo tomo muy enserio, después de forcejear con el me di cuenta que sus ojos se
veían apagados, sin vida, el no era un humano disfrazado, era real, lo único
que nos dieron fue una pistola con balas de pintura, y le dispare todas las
balas, después le di de golpes con la pistola, después de mucho golpearlo lo
logre matar, si se le puede decir así, Luis estaba tirado en el piso, sobre un
charco de su propia sangre, un charco enorme, me miro, se podía notar en dolor
en su rostro, la angustia, el miedo. No supe que hacer, Luis tenía la mano
sobre la herida del cuello como queriendo detener la hemorragia, cuando vi que
su mano cayo, entendí que él no estaba ya con nosotros, simplemente me fui.
Y Paula y María?–note que sus ojos empezaron a lagrimear–
No las he visto desde entonces, AAHH¡–dio un gran golpe a la pared–no
sé dónde están y estoy muy preocupado, yo simplemente me vine para acá porque
conozco el lugar, pero no sé dónde están, no sé dónde están¡–puse mi mano sobre
su hombro derecho–no te preocupes las encontraremos, ellas no son débiles,
vamos a buscarlas. Y diciendo eso salimos del salón, en donde te
metiste?–pregunto Luis– traes una pistola, una espada y un perro. Voltee a ver
a polilla y recordé a Lucy, recuerdas a la chica que una vez me pidió cambio en
la copiadora?– Luis asintió con la cabeza–pues ella tenía problemas con sus
papas, este perro es de ella, su fiel amigo, ella murió, entre en su casa ahí
tome la espada, la pistola la tome de una patrulla, de un policía muerto, quien
diría que nuestro semestre seria así?–eso puso una leve sonrisa en el rostro de
Luis– bajamos las escaleras y nos dirigimos rumbo a biblioteca, el aire se
había tornado denso, había un olor a muerte, seguíamos caminando, a nuestras
espaldas se escuchó un grito de mujer, volteamos y era Paula, detrás de ella 2
zombis, nunca la había visto correr así, corrimos hacia ella, cuando la
alcanzamos me abrazo, estaba temblando, los zombis se acercaban, la solté, tome
la pistola y le apunte a uno a la cabeza, jale el gatillo, le hice un agujero
en su horrible cabeza, el otro me ignoro y siguió su camino hacia Paula, Luis y
polilla, tome la espada y corrí hacia él, polilla reacciono y le mordió las
ropas para que no se moviera, y de un solo golpe le separe la cabeza del
cuello.
Me acerque a Paula, estas bien?–era una pregunta tonta viendo la
situación–si, si, si–no paraba de llorar y temblar, la abrace de nuevo, pude
sentir el latido de su corazón, era realmente rápido, y fuerte como un
martilleo
María? donde esta María?–le pregunte–no lo sé, íbamos huyendo de esas
cosas, y no sé, la perdí de vista, íbamos por rumbo al estacionamiento, podía
ver nuestro salón, así que decidí ir para allá, pero no puede por esas cosas, y
después no la he vuelto a ver.
En ese momento, recordé la chica que vi ser devorada por los zombis,
creo que se dónde está–les dije con un tono muy serio–nos dirigimos hacia donde
estaría el cadáver de María, efectivamente era ella la joven que mire, su
cuerpo yacía en el suelo, inmóvil, sin el mínimo rasgo de vida, Paula se soltó
llorando, abrazada de Juan, me arrodille, y cerré los parpados de María. En ese
momento, no cruzo otra cosa por mi mente, teníamos que escapar de ahí lo más
pronto posible, no permitiría que nadie más de nosotros muriera, ya perdí a dos
amigos, no quiero perder más.
Imagen de ian |
No hay comentarios:
Publicar un comentario